Es una manualidad tradicional para la que parece que no pasa el tiempo. Se suele realizar siendo niños, pero muchos no se resisten a seguir haciéndola en la edad adulta. Hablamos de una actividad que no sólo es un entretenimiento, sino también una sencilla manera de desarrollar la creatividad. Además, se disfruta antes, ideando el boceto; durante, con las manos pringadas; y después, degustando el alimento. Sí, pintar huevos de Pascua implica todo esto. Una vez cocidos, sólo hay que dar rienda suelta a la imaginación y estar dispuestos a pasarlo en grande. Con todo, en Pinturas Blatem hemos seleccionado algunas propuestas que os pueden inspirar para el caso 😉
Para los amantes del diseño y de los colores:
Quienes tienen más maña se pueden atrever con:
Un acabado original usando gomas elásticas al pintar:
Si no te conformas con uno, lo tuyo son las esculturas:
Los universales emojis como recurso fácil y resultón:
¿Cuál os ha gustado más? ¡Ah! Y no dudéis en enseñarnos vuestras creaciones 😛